viernes, 17 de febrero de 2012

EL INVESTIGADOR DEL SIGLO XXI


DUARTE TANIA
LUQUE GRECIA
ROJAS ISBELIA
SANCHEZ DORI
QUINTERO LEIDIS

El siglo XXI, se presenta como un reto histórico para la investigación, pues  el perfil del sujeto debe estar sustentado en características esenciales  como la sensibilidad y la creatividad, corrigiendo toda debilidad en las distintas áreas del conocimiento, entendiendo que el conocimiento es un TODO. Desde esta perspectiva, es inminente el nacimiento de un nuevo paradigma donde se rompan con las limitaciones observadas en teorías científicas con matiz dogmático y audazmente positivista, dejando de lado el surgimiento y evolución de la gnoseología como rama de la filosofía y de las distintas interrogantes que desde Platón y Aristóteles han quedado como legado para la humanidad.
Visto desde esta óptica, la ciencia debe asumir un nuevo enfoque fundamentado en un conocimiento reflexivo  y alejado de axiomas y preceptos lógico-formal o lógico-matemático, que encasillan la creación de un nuevo conocimiento, concepción heredada del positivismo lógico. Podemos considerar que el conocimiento y sus procesos mentales  realizan una percepción con un consiguiente conocimiento que le da sentido al sujeto y al objeto, generando conocimiento y/o afirmación, los cuales pueden ser evidentes en la medida que tengan una sustentación científica de confiabilidad bajo el uso de métodos, técnicas, estrategias y procedimientos para aprehender.
Es bueno considerar la relación de la epistemología con la complejidad académica, pues en la actualidad se ha cercenado el derecho a la divergencia del pensamiento y por ende a los procesos mentales, ya que no basta una definición epistemológica de los términos, de manera simple, incongruente, de ahí el problema curricular en los sistemas educativos. En consecuencia, la epistemología del siglo XXI estudia la realidad como un todo, integrando el sujeto social con su entorno como una praxis colectiva inter y tras- disciplinaria, la primera pretende la integración entre las disciplinas de naturaleza intrínseca, considerando la parte cognitiva del individuo, y la segunda posee contenidos de amplia y compleja significación, inclinándose por eventos en los que no existen fronteras entre las disciplinas, permitiendo así unir diferentes áreas de conocimiento, que permitan a docentes, estudiantes acercarse a la realidad en consonancia a un pensamiento integral, holístico, multidisciplinario y por ende un pensamiento crítico, capaz de abordar planteamientos complejos.
Es de relevancia como dice Beynam (1978), “actualmente vivimos un cambio de paradigmas en la ciencias, tal vez el cambio más grande que se ha efectuado hasta la fecha… y se deriva de la vanguardia de la física contemporánea”; lo cual no significa que se deje de lado los aportes de Galileo, Descartes y Newton, sino que, se visualicen en un contexto más amplio y concatenado, en un paradigma sistémico, pues estamos inmersos en un mundo de sistemas, basado en conjunción dialéctica con independencia y búsqueda de la contextualización de manera de integrar la realidad.
En consecuencia, cada disciplina deberá hacer  una revisión, una reformulación o una redefinición de sus propias estructuras lógicas individuales para asumir un nuevo modelo multidisciplinario y transdisciplinario, y así comprender a través de un todo, de una lógica dialéctica, donde el sujeto sea considerado por sus valores, intereses, creencias y el objeto en estudio; bajo los métodos cualitativos o emergentes.
En palabras de Newton, el investigador deberá  “subirse sobre los hombros de docenas de pensadores eminentes” y desde esa verdad crear una nueva concepción epistemológica a la vanguardia de los avances científicos y en correspondencia con la realidad contextual. En conclusión, el objeto final de la ciencia investigativa, es la construcción del conocimiento en pro del bienestar integral del ser humano, bajo un enfoque ecologista que le permita vivir en armonía con el medio ambiente  evitando, la degradación del mismo, el totalitarismo en nombre de la ciencia, guerras globales que desde la modernidad han perjudicado la humanidad. 

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